Cruasanes de queso de cabra y mermelada de arándanos

El cruasán, del término francés croissant, es quizás el producto más famoso de la bollería.  En América se le conoce también por cuernitos, cangrejos y cachitos. Se trata de un bollo elaborado con hojaldre enriquecido, crujientes por fuera y muy tiernos por dentro, con forma de media luna. Muchos de los postres preparados en casa, aunque no resulten más económicos, se elaboran con mejores materiales de los que adquirimos de las confiterías o supermercados. El resultado si le damos un buen punto siempre es superior a los comerciales y tienen la ventaja de poder conservarse sin consumirlos durante más tiempo.

Ingredientes:

1 plancha de hojaldre redonda
1 rulo de queso de cabra
1 bote pequeño de mermelada de arándanos
1 huevo para pintar

Preparación:

Extendemos la plancha de hojaldre sobre la mesa de trabajo sin quitarle el papel que la envuelve.

La dividimos en 8 partes iguales utilizando el utensilio de marcado de hojaldre.

Ponemos en cada esquina de cada una de las partes una rodajita de queso de cabra y encima de ésta una cucharadita de mermelada de arándanos.

Precalentamos el horno a 180 grados.

Con cuidado vamos enrollando cada una de los cruasanes y por la forma en que hemos cortado la masa deben quedarse como medias lunas.

Pintamos de huevo batido y metemos al horno durante 20 minutos aproximadamente, (depende del horno), los sacamos y dejamos enfriar.

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